La gestión de nuestros ríos, clave en las relaciones Argentina-Uruguay
Héctor Lescano Fraschini
Merecen valorarse y difundirse las buenas noticias provenientes de las Comisiones Binacionales uruguayo-argentinas, especialmente las referidas a la gestión de nuestros ríos y sus cuencas como aporte sustancial en las relaciones bilaterales y a la mirada hacia el futuro de una aún mayor y mejor integración, cuyo mandato nos viene de la historia.
Esta semana, confirmando el compromiso de ambos países de continuar hacia el futuro el camino compartido, tendrá lugar un evento en el Palacio San Martín presidido por los cancilleres Jorge Faurie y Rodolfo Nin Novoa; y por Mauro Vazón y Felipe Michelini, representando a las delegaciones integradas de ambos países en las comisiones administradoras del Río Uruguay (CARU) y del Río de la Plata (CARP), respectivamente. Darán el marco político y la rendición de cuentas de los avances registrados, reafirmando los alcances de estos para asegurar la navegabilidad, las ventajas competitivas fluviales para la producción, y la responsabilidad ambiental y social de los proyectos integrales e inclusivos.
La finalización del dragado del Canal Martín García en los términos de una licitación internacional signada por absoluta transparencia y rigor jurídico que, cumpliendo en términos de proceso las etapas de recuperación y mantenimiento, ha profundizado el canal a 34 pies en fondos blandos y 38 pies en fondos duros, debe calificarse como un hecho de gran trascendencia.
Estos avances, que deben complementarse con los de otra útil vía navegable como es la Bravo-Guazú-Talavera (de jurisdicción argentina), constituyéndose así como vía alternativa a la Ruta Troncal que pasa por el importante Canal Emilio Mitre, se realizan en el marco de relaciones y funcionamiento de la CARP altamente satisfactorio. Se ha remodelado la subsede de Buenos Aires y acordado la ampliación de la sede en la Isla Martín García, donde ya se han realizado al menos tres reuniones de trabajo de nivel ministerial (Relaciones Exteriores, Transporte y Obras y Turismo) y de delegaciones parlamentarias representando a todos los partidos políticos de los dos países, lo que consideramos un hecho significativo.
La naturaleza ha permitido, a su vez, una situación que merece celebrarse como un acontecimiento histórico: la unión de la Isla Martín García con la Timoteo Domínguez, de jurisdicción oriental; estableciendo la primera frontera terrestre entre nuestros países hermanos. Una vez aprobados los acuerdos limítrofes correspondientes y con el debido soporte jurídico para los aportes públicos y privados, tendrá lugar la puesta en valor turística y náutica de la zona.
La CARU avanzó en el Proyecto de Dragado de Profundización y Balizamiento del Río Uruguay. El río está profundizado a 25 pies (23 de calado) en relación con los ceros locales corregidos y ensanche del canal a 100 metros (ancho de solera) desde su kilómetro 0, en Nueva Palmira, hasta Concepción del Uruguay, kilómetro 187; y desde allí hasta Paysandú, profundizando a 19 pies y 80 de ancho de solera. Los resultados del dragado y el balizamiento con boyas de última tecnología, y cuyo fondeo fue realizado por las Armadas de ambos Estados, están a la vista con el incremento que se ha dado en el transporte fluvial y la operativa portuaria sobre ambas márgenes, donde se están cargando buques por encima de las 20 mil toneladas.
Dentro de este trabajo bilateral, en marcha se encuentran el dragado de mantenimiento y los estudios para encarar el dragado del Paso San Francisco con el fin de habilitar la navegación segura de barcazas en el tramo Paysandú-Salto/Concordia. También la intención de sumar en aspectos de gestión a un socio clave para nuestros dos países como es Brasil; teniendo en cuenta que el nacimiento del Río Uruguay se produce en su territorio y la importancia de la conectividad río arriba.
Los esfuerzos conjuntos incluyen, por cierto, las acciones para consolidar y optimizar los monitoreos en el Río Uruguay previstos en las Notas Reversales, realizados en forma mensual y publicando los correspondientes resultados. De gran importancia será la construcción del Laboratorio Ambiental Binacional, fortaleciendo al actual de la CARU.
Una mención importante merece el formidable Proyecto de Renovación y Modernización de la Represa de Salto Grande, presentado recientemente en Buenos Aires durante un acto presidido por el canciller Faurie y el secretario de Energía argentino, Gustavo Lopetegui; en espejo al llevado a cabo días antes en Montevideo.
El presidente de la Delegación Argentina de la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande, Roberto Niez, y el delegado en materia energética del BID, Ariel Yepez (con un juicio muy elogioso a la gestión binacional) en un panel técnico de gran nivel desarrollaron las tres etapas que a 30 años nos implicarán a Argentina y Uruguay en trabajo conjunto mediante una inversión de mil millones de dólares, comenzando la primera de ellas con un financiamiento de 80 millones.
Un proyecto mediante el cual se busca extender la vida útil del Complejo Hidroeléctrico binacional, su capacidad de producción, eficiencia y seguridad; y que, a 40 años de su puesta en funcionamiento, bien ha sido definido por el presidente de la Delegación Uruguaya en la CTM, ingeniero Gabriel Rodríguez, como «un hito para la refundación de Salto Grande». Un proyecto clave dentro de una agenda de temas de suma importancia que apoya el camino de la descentralización y aporta al desarrollo sostenible de las comunidades locales; objetivos que inspiran la labor conjunta en todas nuestras comisiones binacionales.
El autor es embajador de la República Oriental del Uruguay en Argentina, Héctor Lescano Fraschini.